Peter Phillips es uno de esos miembros de la familia real británica a los que, sorprendentemente, el gran público no conoce demasiado.
Lejos de los dramas de hermanos de Enrique y Guillermo o de los escándalos de pedofilia que acechan al príncipe Andrés. Peter de 44 años, pertenece a una generación que ha podido tomar una decisión: ser muy famoso o pasar del todo desapercibido.
En su caso ha optado por esta segunda opción. Como nieto de la reina Isabel podía haber tenido título de príncipe, al igual que su hermana Zara de princesa. Pero ni su madre, la princesa Ana, ni ellos mismos de adultos lo reclamaron.
Un síntoma más de esa extraña normalidad real ha llegado ahora, cuando ha lanzado un comunicado, tan discreto como él mismo, donde da detalles de su divorcio con Autumn Kelly, la que fue su esposa durante casi 13 años y de la que anunció que se separaba en febrero de 2020.
Lo que en el caso de casi cualquiera de sus otros primos (Guillermo, Enrique, las princesas Eugenia y Beatriz) habría sido carne de cañón tanto para medios serios como para tabloides, en este caso ha pasado casi desapercibido. Y eso que sus detalles eran llamativos precisamente por eso, por ese perfil bajo y conciliador.
Los Phillips, que llevan año y medio tratando de dirimir su divorcio en los tribunales y con una pandemia de por medio, con los tiempos y los lastres a los que se enfrenta cualquier otro ciudadano británico, lanzaron un comunicado el lunes por la tarde para dar cuenta de su situación.
Una forma de expresarse poco común entre miembros de la realeza y que continuaba, también de forma inusual, expresando sus sentimientos. “Pese a que este es un día triste para Peter y Autumn. Siguen anteponiendo el bienestar y la crianza de sus maravillosas hijas Savannah e Isla. Siendo esto lo primero y principal”.
“Tanto Peter como Autumn están felices de haber resuelto estos asuntos de forma amistosa. Ambos han pedido privacidad y consideración para sus hijas mientras la familia se adapta a este nuevo capítulo de sus vidas”, remataba sus palabras, recogidas por Hello, el ya exmatrimonio.