La comunidad cristiana de Gaza ha expresado su alegría tras la reciente elección del cardenal Robert Prevost como nuevo líder de la Iglesia católica. Este momento marca un hito significativo, ya que Prevost, un misionero originario de Chicago, se convierte en el primer papa estadounidense al tomar el nombre de León XIV. Esta elección genera esperanzas en la diminuta comunidad cristiana de Gaza, que espera que el nuevo papa continúe el legado de su predecesor, el papa Francisco, quien mostró una notable preocupación por la situación del enclave.
George Antone, jefe del comité de emergencia de la Iglesia de la Sagrada Familia, ha compartido su entusiasmo, subrayando la importancia de que el nuevo pontífice mantenga su atención en Gaza, un territorio azotado por la guerra. Antone hizo un llamado a León XIV para que visualice la realidad de Gaza a través de la misma óptica que su predecesor, quien había hecho virtudes de la paz y el entendimiento en sus discursos.
La situación en Gaza ha sido trágica y devastadora. La guerra estalló en octubre de 2023, tras un ataque de militantes de Hamás que resultó en la captura de 251 rehenes y aproximadamente 1,200 muertes, según reportes de Israel. La respuesta israelí ha sido feroz y ha causado la muerte de más de 52,000 palestinos, dejando una gran parte del territorio en ruinas.
La comunidad de cristianos, que se estima en alrededor de 1,000 individuos en Gaza, se mantiene activa en medio de este contexto complicado. El complejo de la Iglesia de la Sagrada Familia no solo es un lugar de culto, sino también un refugio para ancianos y niños, que acoge actualmente a unos 30 musulmanes, generando un espacio de coexistencia en medio de la adversidad.
Hamás también ha reconocido la elección de León XIV, manifestando la esperanza de que el nuevo papa continúe con el legado de apoyo a los oprimidos y se oponga a lo que consideran un genocidio en Gaza. Este contexto humanitario resuena en las palabras de Antone, quien ha hecho un llamamiento a mantener viva la visión de paz y empatía que caracterizó al papa Francisco.
Con el nuevo liderazgo en el Vaticano, la comunidad de Gaza aguarda con expectativa que la atención internacional se dirija hacia su situación, buscando así un cambio esperanzador en un entorno tan desolador. La historia de Gaza es una historia de resiliencia, y el nuevo papa podría ser un faro de esperanza en tiempos de necesidad.
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