El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) de Guatemala ha confirmado el cese de la actividad del volcán de Fuego. Este coloso, que ha mostrado su furia en varias ocasiones, había provocado la evacuación de más de 700 personas desde mediados de esta semana, quienes fueron reubicados en albergues para garantizar su seguridad.
La peligrosidad del volcán de Fuego no es un fenómeno nuevo; en 2018, una poderosa erupción resultó en la devastación de una comunidad cercana, dejando un saldo trágico de más de 200 vidas perdidas. Las autoridades han informado que, tras analizar diferentes parámetros y revisar las cámaras web —que ya no registran actividad incandescente ni emisiones significativas de ceniza—, se ha determinado que la erupción que comenzó el 4 de junio ha llegado a su fin.
Entre los evacuados se encontraban residentes de los departamentos Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango. La situación ha llevado a muchos a reflexionar sobre la seguridad frente a la pérdida material. “A veces, cuando crecemos, somos necios y no queremos irnos por cosas materiales, por nuestras casas, pero proteger la vida de nuestros hijos es más importante”, señaló Olga López, una vecina afectada.
Por el momento, las autoridades han cerrado las carreteras alrededor del volcán y los cuerpos de socorro se mantienen en estado de alerta ante cualquier posible eventualidad.
Esta información, con fecha de publicación original del 6 de junio de 2025, destaca la continua necesidad de vigilancia y preparación en áreas propensas a desastres naturales. La comunidad permanece atenta y esperando detalles sobre la reanudación de la normalidad tras estos eventos adversos.
Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial. No olvides comentar sobre este articulo directamente en la parte inferior de esta página, tu comentario es muy importante para nuestra área de redacción y nuestros lectores.