La secretaria de Cultura de México, Claudia Curiel de Icaza, afirmó en la tercera Conferencia Mundial de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) sobre Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible, que los pueblos originarios son pilares esenciales de la identidad nacional y portadores de un futuro compartido. Esta afirmación fue parte de un discurso durante el evento que tiene lugar en el Centro de Convenciones Internacional de Barcelona, España.
Curiel de Icaza enfatizó que México está inmerso en un proceso de transformación hacia una nación más inclusiva, con políticas que ahora visibilizan y atienden a aquellos que, históricamente, fueron marginados, como las mujeres indígenas. En este sentido, señala la importancia de rescatar y reconocer las raíces culturales del país, un esfuerzo que busca “sanar su memoria”. En este contexto, se conmemoró una disculpa pública del gobierno mexicano a los pueblos originarios por siglos de discriminación y olvido y se recuerda el reciente reconocimiento constitucional de los derechos culturales de este sector.
Además, expuso el compromiso de México por actualizar la Carta Cultural Iberoamericana, adaptándola a los desafíos actuales del siglo XXI. Entre las propuestas, se encuentran la protección de los derechos colectivos de los pueblos originarios y afrodescendientes, el fortalecimiento del derecho a la educación artística, el impacto de la inteligencia artificial en la creación cultural y la inclusión de mujeres y personas con discapacidad en actividades culturales.
La funcionaria hizo hincapié en que el evento Mondiacult refuerza la colaboración regional, particularmente en áreas como la defensa del patrimonio cultural y la restitucción de bienes culturales sustraídos. Además, Curiel de Icaza advirtió sobre un panorama global caracterizado por el individualismo y las desigualdades, así como por tensiones geopolíticas y crisis ambientales. Resaltó la necesidad de aprovechar el potencial de la cultura para fomentar la paz, la justicia social y el bienestar colectivo, subrayando que el desarrollo no puede pensarse sin una base cultural fuerte.
El Mondiacult 2025, inaugurado por el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha congregado a delegaciones de más de 150 países, a pesar de la ausencia de Estados Unidos e Israel. Los temas de discusión se centran en los derechos culturales, la era digital, la relación con la economía y las dimensiones del cambio climático, incluyendo la defensa del patrimonio en situaciones de crisis. A petición de España, se han incluido temas sobre inteligencia artificial y su relación con la paz.
La información presentada se basa en datos de la celebración del evento el 1 de octubre de 2025, y refleja un periodo actual de interés por el reconocimiento y promoción de las diversas culturas que conforman la rica herencia de México y su compromiso con un futuro más inclusivo.
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