La gestión de recursos humanos se ha convertido en un factor crucial para el bienestar de los empleados y el éxito de las organizaciones en un entorno laboral cambiante. Expertas en el área se reunieron recientemente en el congreso México Talent RH para discutir cómo la cultura laboral influye en la retención del talento.
La líder de Desarrollo Organizacional en una conocida empresa, Ángela Ruiz, compartió que la pandemia ha exigido una transformación en las estructuras organizativas. Ahora, las empresas deben priorizar la flexibilidad laboral sobre las tradicionales jornadas de trabajo de ocho horas frente a una pantalla. La productividad, más que la presencia física, define el rendimiento de un empleado.
De acuerdo con Aon, las preocupaciones relacionadas con el talento son, en última instancia, preocupaciones empresariales. Por ello, recursos humanos debe centrarse en estrategias que engloben compensación, transparencia y sostenibilidad, buscando crear equipos de alto rendimiento que aseguren un retorno de inversión significativo.
Una encuesta de Minu indica que el 56% de las empresas enfrenta el reto no solo de atraer sino de retener el talento existente. Judith Rodríguez, gerente de Talento Humano en Magnocampo, subrayó la importancia de conocer al equipo para desarrollar estrategias efectivas, señalando que el área de recursos humanos debe abordar tanto los problemas como las buenas noticias, y que la capacidad de escuchar y resolver conflictos es esencial en el perfil de un buen profesional de esta área.
La cultura de cercanía se destaca como un valor fundamental, que propone una conexión más humana entre líderes y colaboradores. Este enfoque invita a los gerentes a tomarse el tiempo para preguntar a sus equipos sobre su bienestar, no solo en el ámbito laboral, sino también en lo personal, lo que puede incrementar el compromiso de los empleados.
Además de la cercanía, Cristina Ibarra, directora de Recursos Humanos de Jabil en Latinoamérica, enfatizó la necesidad de entender las motivaciones individuales de cada empleado para maximizar sus habilidades. Mientras tanto, Elena Solano, de Grupo Solar, sugirió monitorear indicadores como la rotación y el ausentismo, y tener equipos especializados que puedan contribuir a resultados significativos.
El panorama laboral actual ha hecho evidente que las estrategias de recursos humanos deben adaptarse a las particularidades de cada empresa. Las remuneraciones, la cercanía, proyectos de certificación de habilidades y planes de desarrollo se erigen como los elementos más requeridos.
Los líderes en la gestión de equipos desempeñan un papel clave, creando planes de desarrollo individual y asegurando una congruencia entre la alta dirección y los empleados. Judith Rodríguez propuso que la comunicación fluida sobre objetivos a largo plazo fomenta un sentido de pertenencia y propiedad entre los colaboradores.
Por último, la tecnología también ha hecho su aparición en las estrategias de recursos humanos, como en el caso de una empresa que utiliza agentes virtuales para guiar a los líderes en la gestión de crisis. Esto no solo optimiza operaciones, sino que también permite un seguimiento más preciso de los casos individuales, elevando la eficiencia del área.
Mientras las empresas se adaptan a este nuevo paradigma laboral, la esencia de la gestión del talento humano radica en la cercanía y el liderazgo efectivo. Con estas bases, es posible construir una cultura organizacional que fomente el crecimiento y desarrolle equipos capaces de enfrentar los desafíos del futuro.
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