La reciente presentación de NeoArctic en el Festival Internacional Cervantino (FIC) ha generado un profundo eco reflexivo sobre la manera en que habitamos nuestro planeta. Este espectáculo, que se realizó el viernes en el Auditorio del Estado de Guanajuato, es un trabajo de la compañía danesa Hotel Pro Forma, bajo la dirección de Marie Dahl. La obra mezcla elementos visuales y musicales, proporcionando una meditación sobre temas críticos como el cambio climático, la urbanización, y la pérdida de biodiversidad.
La performance llevó a los espectadores a un viaje sensorial. La voz del Coro de la Radio de Letonia resonó entre sombras y luces, con melodías que evocaban imágenes de hielo derritiéndose y transformaciones de la materia, presentando fragmentos poéticos que abordaban la naturaleza y la plasticidad del mundo moderno. Doce intérpretes, ataviados con túnicas brillantes y gafas rojas, aportaron un ritmo visual que sorprendió y desconcertó a los asistentes.
NeoArctic se organiza a través de tres conceptos: Grano, que explora la movilidad de materiales; Vapor, que se enfoca en los cambios de estado de la materia; y Rayo, que examina la circulación de energía. Cada segmento incorporó piezas musicales de diversos artistas, con títulos como Canción al plástico y Canción para la turbulencia, que reflejan la complejidad de nuestra relación con el entorno.
Las proyecciones de paisajes en mutación y una manipulación hábil de luces ilustraron una narrativa del Antropoceno, cuestionando la responsabilidad humana hacia la Tierra. Durante la actuación, el coro ofreció un rico espectro de tonalidades que abarcaban desde azules profundos hasta carmesí, sugiriendo un abanico emocional que resonaba profundamente con el público.
Los comentarios de los asistentes coincidieron en una percepción de saturación tecnológica y la necesidad de reflexionar sobre nuestra forma de existir en el mundo actual. Algunos describieron el espectáculo como “más que una presentación, una meditación sobre la belleza y el colapso”, enfatizando la mezcla única de música, luz y proyecciones que dejaba preguntas persistentes en el aire.
Fundada en 1985, Hotel Pro Forma ha ganado reconocimiento por su enfoque experimental en las artes. La compañía, que ha presentado NeoArctic en diversas ciudades de Estados Unidos, Europa y Asia, ha sido elogiada por su carácter multidisciplinario y la intensidad de sus experiencias sensoriales.
Al término de la función, el público reaccionó con un silencio notable antes de estallar en aplausos, que no solo celebraban la producción, sino también la conciencia despertada sobre el estado crítico del mundo. Galardonada con el Premio Reumert en Dinamarca, la obra continúa su recorrido con dos funciones más, y se presentará mañana a las 20 horas en el teatro del Bosque Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque (CCB), como parte del Circuito Cervantino en la Ciudad de México.
Esta experiencia artística se convierte en un recordatorio claro de las exigencias que enfrenta nuestro tiempo, un llamado a la reflexión que es tan urgente como necesario.
Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial. No olvides comentar sobre este articulo directamente en la parte inferior de esta página, tu comentario es muy importante para nuestra área de redacción y nuestros lectores.