Cadillac inicia su camino en la F1 con Checo Pérez.

Cadillac se prepara para hacer su debut en la Fórmula 1 como undécimo equipo en 2026. Con el objetivo de optimizar su rendimiento en esta nueva aventura, la escudería estadounidense ha conseguido dos días de pruebas con un monoplaza SF-23, proporcionado por Ferrari, que compitió en la temporada 2023. Estas jornadas tendrán lugar en el circuito de Imola los días 13 y 14 de noviembre.

El piloto Sergio Pérez ha sido designado para manejar el coche durante estas pruebas. Según las regulaciones de la Fórmula 1, los equipos solo pueden realizar test con vehículos de al menos dos años de antigüedad, lo que permite a Cadillac familiarizarse con los aspectos técnicos y operativos de este deporte. Aunque la principal intención de la escudería no se centra en el rendimiento, estas sesiones son cruciales para adaptar al equipo a la dinámica de la Fórmula 1.

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La preparación incluye aspectos internos vitales, como establecer una comunicación efectiva entre ingenieros y pilotos, acostumbrar a los mecánicos a diferentes tareas y verificar el funcionamiento de la radio y otros elementos esenciales. Graeme Lowdon, director del equipo, ha declarado que su enfoque principal es asegurar que todos los miembros del equipo tengan la misma experiencia que sus contrapartes en el pitlane. “Queremos que nuestros mecánicos se acostumbren a la memoria muscular necesaria para manejar un coche de F1”, explicó Lowdon, enfatizando la importancia de una preparación adecuada.

No obstante, algunos equipos han expresado su descontento con la concesión de estas pruebas, temiendo que esto otorgue a Cadillac una ventaja competitiva en 2026. Lowdon ha rechazado estas preocupaciones, reiterando que el objetivo principal es la integración del equipo y no el desarrollo del coche en sí.

Por otro lado, Valtteri Bottas, compañero de Pérez, no podrá participar en estas pruebas debido a un contrato vigente con Mercedes hasta finales de 2025. Tras haber sido parte de Mercedes durante cinco años, donde logró diez victorias, Bottas ha regresado como tercer piloto, lo que complica su integración con Cadillac. Mientras tanto, Pérez, al no tener compromisos contractuales con ningún equipo tras su salida de Red Bull, está libre para rodar y trabajar en simuladores, lo que le permite adaptarse rápidamente a su nuevo entorno.

Con estas pruebas en Imola, Cadillac no solo busca un primer contacto con la categoría, sino también como un escalón fundamental hacia su muy anticipado ingreso en la Fórmula 1. Sin duda, estos días de rodaje marcarán el inicio de una nueva era en la escudería y la competencia automovilística.

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