Alejandro “Mono” González: Un ícono del muralismo chileno recibe el Premio Nacional de Artes Plásticas 2025
El muralismo chileno celebra con fervor el reciente reconocimiento de Alejandro “Mono” González, un referente indiscutible en el arte público de América Latina. Este destacado muralista ha sido galardonado con el Premio Nacional de Artes Plásticas 2025 de Chile, un reconocimiento otorgado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, que destaca su profunda huella en el muralismo y la cultura chilena.
El artista, actualmente de gira en México, recibió la noticia con humildad, recordando que su labor siempre ha sido un esfuerzo colectivo. “No soy yo el representante individual, sino que es un trabajo colectivo que viene desde la calle y desde la participación de los usuarios que tenemos”, manifestó. González también subrayó la importancia de su trabajo para las generaciones más jóvenes a las que se dirigen sus obras, indicando que el reconocimiento no se refiere solo a su persona, sino a una rica historia y a un compromiso con la sociedad.
La ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo, destacó la trayectoria de González, señalando que su trabajo ha “unido creatividad, compromiso social y expresión colectiva”. A lo largo de casi seis décadas, sus innovadoras obras han embellecido miles de espacios públicos en Chile, Latinoamérica y otros rincones del planeta, convirtiéndose en un símbolo de identidad y memoria.
Entre sus creaciones más emblemáticas se encuentran las obras en la estación Parque Bustamante del Metro de Santiago y el mural titulado El primer gol del pueblo chileno, realizado en 1971 junto al prestigioso artista Roberto Matta. La influencia del muralismo mexicano y el trabajo de grandes exponentes de la técnica han dado forma a su estilo, así como su colaboración con la Brigada Ramona Parra, un símbolo de la expresión artística asociada a las Juventudes Comunistas en Chile.
Alejandro “Mono” González ha sabido utilizar el muralismo no solo como un medio estético, sino también como un vehículo de transformación social, lo que lo convierte en un protagonista esencial en la narrativa artística contemporánea chilena. Su reconocimiento por el Premio Nacional de Artes Plásticas 2025 no solo celebra su trayectoria individual, sino también el espíritu vibrante y colectivo de un arte que sigue impactando y resonando entre las generaciones actuales y futuras.
La información presentada corresponde a los hechos y declaraciones del 10 de septiembre de 2025 y refleja la situación y el contexto cultural de aquel momento, en un ámbito donde el arte continúa siendo un motor clave de la identidad social y cultural de Chile.
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