El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, ha confirmado una reunión con funcionarios chinos en Estocolmo la próxima semana, en el contexto de la inminente entrada en vigor de aranceles significativamente más altos, cuya fecha límite es el 12 de agosto. Esta reunión representa el inicio de un tercer ciclo de negociaciones entre las dos mayores economías del mundo, programadas para el lunes y martes próximos. Bessent ha anticipado que durante este encuentro se discutirá la posibilidad de extender el plazo para la implementación de estos gravámenes.
Desde principios de este año, Estados Unidos y China han estado imponiéndose mutuamente tarifas aduaneras que han ido en aumento, alcanzando cifras de tres dígitos, un escenario que ha generado un freno notable en el intercambio comercial bilateral. Sin embargo, luego de varias reuniones en Ginebra, ambos países llegaron a un acuerdo para reducir temporalmente estas tarifas en un intento de desescalar las tensiones comerciales, aunque este acuerdo vencerá el mes que viene.
Bessent subrayó durante una entrevista que se prevé un incremento de los aranceles hacia otros socios comerciales estadounidenses, quienes enfrentan una fecha límite el próximo 1 de agosto. No obstante, el secretario afirmó que Washington continuará comprometido con las conversaciones.
La actitud proactiva de ambos países en medio de un clima económico complejo es indicativa de la importancia que representan para la economía global. La evolución de estas negociaciones y su impacto en las relaciones comerciales es un tema que merece seguimiento atento, ya que podría tener repercusiones significativas más allá de sus fronteras.
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