La Máquina de Cruz Azul vivió una jornada inolvidable por las razones equivocadas en la Leagues Cup 2025, marcando un hito negativo en su historia al recibir una brutal goleada de 7-0 a manos del Seattle Sounders. Este partido no solo resultó en una eliminación prácticamente asegurada para el club mexicano, sino que también se convirtió en la mayor derrota de un equipo de Liga MX frente a uno de la MLS en todas las competiciones.
La noche comenzó de la peor manera para Cruz Azul, que no mostró capacidad para reaccionar tras recibir el primer gol. A partir de ese momento, la situación solo empeoró. Seattle aprovechó la desventaja emocional del rival y anotó tres goles en menos de diez minutos, dejando en evidente vulnerabilidad a la plantilla cementera.
A la par de la debacle, los delanteros Gabriel Fernández y Giorgos Giakoumakis no tuvieron impacto alguno en el resultado, ya que ambos fueron enviados a la tribuna debido a lesiones y falta de claridad en sus respectivas situaciones. Mientras tanto, el técnico Nicolás Larcamón fue criticado por su incapacidad para ajustar su estrategia en medio de la tormenta que se desató en el campo.
El partido de alto voltaje continuó con el delantero Jesús Ferreira, quien tuvo un rendimiento destacado pese a que dos de sus goles fueron anulados. El tercer gol del atacante sí contó y fue un golpe devastador para los ya desmoralizados jugadores de Cruz Azul. En particular, el segundo gol de Seattle fue anotado por el mediocampista mexicano Obed Vargas, quien se lució con un disparo que tomó a la defensa por sorpresa.
Este desastroso resultado, que igualó la peor derrota en la historia del club —un 7-0 ante el Club América en agosto de 2022—, resuena como una advertencia para la plantilla y la afición. El camino hacia la posible recuperación se presenta poco alentador, ya que cualquier posibilidad de avanzar en el torneo ahora se torna extremadamente complicada.
Los jugadores de Cruz Azul se preparan para enfrentar al LA Galaxy en Los Ángeles, donde la presión será tremenda, mientras que Seattle se perfila como un serio contendiente, confiando en seguir su racha ganadora en su próximo encuentro contra Santos. La tarea que tiene por delante Cruz Azul es monumental: superar esta dura derrota y resurgir como una fuerza competitiva en el resto del torneo.
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