El guardameta costarricense Keylor Navas, recién llegado a México, se prepara para debutar con Pumas ante Querétaro, un rival que evoca recuerdos de su trayectoria en el Saprissa. En aquella época, Navas sorprendió al futbol nacional no solo por su desempeño como portero, sino también por una inusual anécdota: en un partido de pretemporada, tuvo que ingresar al campo como delantero.
Originario de Pérez Zeledón, Costa Rica, Navas destacó en las divisiones inferiores de Saprissa tras un notable partido contra el equipo de Pedregoso. Su determinación lo llevó al primer equipo, donde tuvo la oportunidad de dejar una huella memorable durante una pretemporada que envolvió viajes por diferentes estados de México. Este proceso, sin embargo, no estuvo exento de desafíos, ya que la plantilla generalmente se reducía a medida que avanzaban los partidos y algunos jugadores se fatigaban o lesionaban.
Roger Mora, su formador, relató que durante el año 2010, Saprissa enfrentó la necesidad de contar con más jugadores durante una serie de partidos en México, lo que llevó a improvisaciones sorprendentes. En un duelo contra Querétaro, donde contaban con solo cuatro jugadores de campo en la banca, Navas, aunque designado como suplente, se vistió con la camiseta de un jugador de campo. Así, en una situación inesperada, le tocó ingresar como delantero en el minuto 70 del encuentro.
A pesar de recibir un golpe inicial que lo hizo tambalear, la habilidad de Navas brilló en la posición menos habitual para él. Roger Mora recuerda que, pese a ser un jugador liviano en físico, su agilidad y capacidad de salto hicieron que su actuación en esa posición fuera digna de aplauso. Aquella tarde en Querétaro se convirtió en un espectáculo, una muestra del talento polifacético que Navas poseía desde sus inicios.
La escasez de jugadores no solo llevó a Keylor al campo, sino que incluso el preparador físico tuvo que asumir una posición en la alineación, mostrando así la dinámica exigente y desafiante de las pretemporadas. Este relato pone en evidencia la perseverancia y adaptabilidad de los futbolistas, así como la rica historia del fútbol costarricense, donde Navas se ha convertido en un emblema.
El regreso de Keylor Navas a las canchas mexicanas, ahora con el Pumas, promete ser un evento significativo tanto para él como para los aficionados, quienes esperan revivir su magia en el arco, pero también recordar aquellos días en que su talento lo llevó a brillar en un rol inesperado.
Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial. No olvides comentar sobre este articulo directamente en la parte inferior de esta página, tu comentario es muy importante para nuestra área de redacción y nuestros lectores.