¿La vacuna antigripal causa enfermedades? Mitos desmitificados.

En el mundo de la salud abundan creencias populares que, aunque repetidas durante generaciones, no tienen base científica. Algunos de estos mitos pueden parecer inofensivos, pero otros generan confusión o incluso desconfianza hacia medidas preventivas eficaces. Aquí desmontamos 10 de los más comunes con ayuda de la evidencia científica:

1. “La vacuna de la gripe provoca gripe”

Falso. La vacuna contiene virus inactivos o fragmentados que no pueden causar la enfermedad. Puede producir molestias leves (como fiebre o dolor muscular), pero no gripe. Además, si la persona ya estaba incubando otro virus respiratorio al vacunarse, es fácil confundir los síntomas.

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2. “La vitamina C previene la gripe”

No del todo. Aunque fue popularizada por el Nobel Linus Pauling, los estudios científicos no respaldan que tomar vitamina C prevenga la gripe. A lo sumo, puede acortar ligeramente la duración del resfriado común.

3. “El frío causa la gripe”

No directamente. El frío no causa gripe: los virus sí. Sin embargo, las bajas temperaturas resecan las mucosas y debilitando sus defensas, y además pasamos más tiempo en interiores, facilitando los contagios.

4. “Beber mucha agua evita la resaca”

Incorrecto. Beber agua ayuda a aliviar los síntomas de la resaca, pero no la previene. La única forma de evitarla es no excederse con el alcohol. La hidratación es útil, pero no un antídoto mágico.

5. “El alcohol destruye las neuronas”

Mito simplificado. El etanol no mata neuronas, pero sí daña las conexiones entre ellas (dendritas y axones). Además, en grandes cantidades, altera la absorción de vitaminas esenciales como la B1, afectando funciones cerebrales.

6. “Leer con poca luz daña la vista”

No hay evidencia. Leer con luz tenue puede causar fatiga visual y dolores de cabeza, pero no daña los ojos ni empeora la visión a largo plazo.

7. “Leer en el autobús provoca desprendimiento de retina”

Totalmente falso. Un desprendimiento de retina se debe a enfermedades o traumatismos, no a leer en movimiento. Lo peor que puede pasar es un mareo o incomodidad visual.

8. “El tamaño del pie predice el del pene”

Sin relación. Estudios científicos no han encontrado ninguna correlación entre la talla del calzado y la longitud del pene. La genética y otros factores influyen, pero el número de zapato no es uno de ellos.

9. “La lógica está en el hemisferio izquierdo y la creatividad en el derecho”

Demasiado simplista. Ambos hemisferios trabajan en conjunto. Algunas funciones se especializan, pero ninguna actividad mental se limita a una sola mitad del cerebro. Es un mito popular sin sustento neurológico.

10. “Solo usamos el 10 % del cerebro”

Rotundamente falso. Utilizamos prácticamente todo el cerebro, aunque no todas las áreas están activas al mismo tiempo. El mito surgió de una mala interpretación de la función de las neuronas y las células gliales.

Conclusión:

Desmitificar creencias populares ayuda a tomar mejores decisiones sobre nuestra salud. La ciencia no siempre da respuestas absolutas, pero sí ayuda a distinguir entre hechos y ficción. La próxima vez que escuches uno de estos mitos, ya sabrás qué responder.

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