La reciente investigación de Mexicanos Primero examina la implementación de la Nueva Escuela Mexicana (NEM) desde la perspectiva de la comunidad docente en diversas entidades del país, incluyendo Jalisco, Michoacán, Sinaloa y Yucatán. El estudio resalta que, aunque los educadores reconocen aspectos positivos del nuevo modelo educativo, como el enfoque en el aprendizaje basado en proyectos y el fomento a la autonomía profesional, también enfrentan desafíos significativos.
Un punto clave abordado en el análisis es la percepción de que el despliegue del modelo fue apresurado. Los docentes expresan que la capacitación proporcionada fue insuficiente, limitándose en muchos casos a las reuniones del Consejo Técnico Escolar, lo que ha generado confusión y una carga administrativa excesiva en sus labores diarias. Esta falta de formación ha sido identificada como una barrera importante para el trabajo colaborativo en la planificación y codiseño de programas educativos.
Los testimonios recogidos evidencian un notable interés por adaptar los contenidos a las necesidades de los estudiantes, pero también una clara incertidumbre ante la ausencia de una ruta formativa definida. La implementación de las nuevas metodologías, incluida la enseñanza basada en proyectos y el uso de herramientas digitales, se ve restringida por esta falta de dirección.
Maura Rubio, directora de Investigación de Mexicanos Primero, destaca que, a pesar de que el nuevo enfoque educativo promueve la vinculación con la comunidad y el desarrollo socioemocional, los docentes se enfrentan a numerosos obstáculos en la práctica. Entre las dificultades mencionadas figuran la escasez de recursos necesarios para los proyectos, la escasa participación de padres y la carencia de apoyo y experiencia en la aplicación de la autonomía docente.
Además, el estudio pone de manifiesto la inquietud sobre las limitaciones de la NEM para fortalecer aprendizajes fundamentales, especialmente en las áreas de lectura, escritura y matemáticas, que son cruciales en la educación básica. Se añade a esto la falta de infraestructura tecnológica, la conectividad insuficiente y la carencia de materiales educativos accesibles para estudiantes con discapacidad, lo que aumenta las desigualdades entre las escuelas y las diferentes regiones del país.
La información presentada refleja el estado de la educación básica en México durante el ciclo escolar 2023-2024 y plantea interrogantes sobre el futuro de la enseñanza en un modelo que, aunque buscado con buenas intenciones, requiere de ajustes y una mejor implementación para cumplir con sus objetivos.
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