El oro ha alcanzado nuevos altos históricos, subiendo más de un 2% en un solo día, impulsado por la expectativa de recortes en las tasas de interés de Estados Unidos y la creciente tensión geopolítica entre Estados Unidos y Venezuela. Este aumento ha llevado el precio del oro al contado a 4,443.65 dólares por onza, con un pico registrado de 4,459.65 dólares. En paralelo, los futuros del oro para entrega en febrero también mostraron un incremento de más del 2%, alcanzando 4,480.45 dólares.
En 2025, el oro ha acumulado un notable aumento del 69.36% hasta la fecha, el mayor avance anual desde 1979, gracias a las intensas compras por parte de los bancos centrales y una fuerte demanda como activo de refugio. La plata, no se queda atrás, registrando un impresionante incremento del 136% en el mismo periodo, alcanzando un precio al contado de 69.06 dólares, impulsada por un déficit de oferta y una creciente necesidad de inversión industrial.
Un factor clave en este auge es el interés sin precedentes en los Exchange Traded Fund (ETF) respaldados por oro, con once meses de entradas históricas registradas en 2025. Según el World Gold Council (WGC), los activos bajo gestión en estos instrumentos alcanzaron un máximo de 530,000 millones de dólares a finales de noviembre. A pesar de este récord, los flujos de inversión en noviembre se redujeron en comparación con los meses anteriores, aunque Asia sigue liderando el repunte con una entrada de 3,200 millones de dólares en instrumentos de oro.
China ha sido la protagonista de esta narrativa, agregando 2,200 millones de dólares en ETF a sus carteras, un movimiento que puede atribuirse a la debilidad del mercado de valores y las tensiones geopolíticas. A su vez, India se ha mantenido como un consumidor constante, y Corea del Sur ha mostrado un creciente interés, buscando refugio frente a la volatilidad del mercado.
En Norteamérica, mil millones de dólares se añadieron a los flujos de ETF en noviembre, aunque de manera más modesta en comparación con los picos anteriores. Este interés fue catalizado por el aumento del precio del oro y la expectativa de recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal ante una inflación más moderada.
Por su parte, Europa ha mostrado una recuperación notable, con flujos que pasaron de negativos a positivos, específicamente con una entrada de 978 millones de dólares, destacando el Reino Unido y Alemania como los principales beneficiarios. Sin embargo, otras regiones, como Australia y Sudáfrica, también han visto pérdidas modestas.
Este contexto de creciente interés en el oro no solo subraya su papel como valor refugio en tiempos de incertidumbre económica, sino que también sugiere que el mercado aún tiene margen para expandirse. Manteniendo un ojo en las fluctuaciones del mercado, el futuro del oro y la plata promete seguir siendo un tema de relevancia en las próximas semanas y meses.
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