Palcohabiente denuncia a propietarios del Azteca.

Joshua Reyes Sámano

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Periódico La Jornada
Miércoles 30 de abril de 2025, p. a10

Los propietarios del Estadio Azteca, actualmente Banorte y sede inaugural de la Copa Mundial 2026, enfrentan una demanda ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por parte de un titular de palco, quien solicita que se respete su derecho a ocupar su lugar en el torneo del próximo verano.

El responsable del palco busca información sobre si podrá acceder a boletos para la Copa del Mundo. Nosotros exigimos que se respete nuestro título de propiedad, que establece que tenemos el derecho de asistir a todos los eventos en el estadio por 99 años desde 1966, declaró a La Jornada Roberto Ruano, secretario general de la Asociación Mexicana de Titulares de Palcos y Plateas.

La controversia por la protección de los espacios de los propietarios de palcos se originó en 2024, cuando se enteraron de la posibilidad de ser excluidos durante el torneo, lo que los llevó a buscar respuestas de la administración del estadio.

El primer afectado decidió presentar ayer una queja ante la Profeco para esclarecer la situación respecto a sus derechos de acceso al palco durante todos los eventos en el estadio Banorte en el Mundial 2026. Consideramos que ya existe una violación a un derecho fundamental del consumidor, el acceso a la información. La petición es invitar al proveedor, es decir, a la empresa responsable del estadio, a manifestarse de manera transparente para garantizar el cumplimiento de sus obligaciones, explicó Ángel Diego, abogado del demandante.

La Profeco ha convocado a una audiencia entre los propietarios de palcos y los dueños del recinto con el objetivo de buscar una conciliación o, caso contrario, avanzar en el proceso legal correspondiente.

Invito a los demás propietarios de palcos a unirse en la defensa de sus derechos, ya que en situaciones como esta, la unión es crucial. Existe plena confianza en esta institución, y la próxima audiencia buscará un acuerdo entre las partes involucradas, añadió el abogado.

Ruano apuntó que, a casi un año del comienzo del Mundial, persiste la falta de acuerdos o avances para los propietarios de plateas, aunque confía en que el diálogo conducirá a una solución positiva.

Nos reunimos casi cada 15 días con el director del estadio, y las conversaciones han sido constructivas; él está haciendo lo posible por ayudar. Lo que anhelamos es que se respete lo ofrecido cuando adquirimos nuestros espacios, tal como se hizo en los Mundiales de 1970, 1986, y la Confederaciones de 1999. Nunca hemos enfrentado inconvenientes, y espero que esta vez no sea diferente, concluyó Ruano.