Republicanos esperan promover recortes fiscales de Trump.

En un momento en que la economía de Estados Unidos navega aguas turbulentas, los republicanos que dominan la Cámara de Representantes hacen frente a la intensa presión de aprobar una legislación fiscal impulsada por el presidente Donald Trump. A pesar de las divisiones internas que amenazan su ya frágil mayoría, estos legisladores han decidido avanzar en el debate sobre un proyecto de ley que promete recortes significativos en impuestos y gastos.

En un contexto complicado, la situación se agrava por la reciente decisión de Moody’s, que ha reducido la calificación crediticia del gobierno. La agencia puso de relieve que las administraciones sucesivas y el Congreso han mostrado una preocupante falta de iniciativa para manejar la creciente deuda nacional, que ya asciende a 36.2 billones de dólares.

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El proyecto de ley, que había estado estancado durante días, encontró su camino en una sesión extraordinaria celebrada el domingo por la noche en la Cámara. Cuatro miembros del ala conservadora votaron a favor de su continuación, mientras que buscaban negociar recortes de gastos más profundos en conversaciones privadas con líderes republicanos y funcionarios de la Casa Blanca. La próxima crucial votación está programada para el miércoles a la 1 de la mañana, donde el Comité de Normas de la Cámara evaluará si el proyecto debe presentarse al pleno.

A pesar de los esfuerzos por unificar a las distintas facciones del partido, se observa una notable división en cuestiones clave, como los recortes propuestos a Medicaid y los límites en la deducibilidad de impuestos estatales y locales. Steve Scalise, el segundo al mando de los republicanos en la Cámara, destacó la necesidad urgente de mantener conversaciones con moderados y ultraconservadores para abordar las inquietudes sobre este complejo proyecto de ley.

El presidente de la Cámara, Mike Johnson, está decidido a que la legislación se apruebe y se envíe al Senado antes del Día de los Caídos, marcada el 26 de mayo. Con una mayoría ajustada de 220-213, los republicanos encaran una delicada balanza en la que cada voto cuenta. Hasta ahora, no han desestimado ninguna de las solicitudes legislativas que provienen de la administración Trump, un indicativo de la fortaleza que el partido busca consolidar en un entorno político polarizado.

La información contenida en este artículo corresponde a la fecha de publicación original, el 19 de mayo de 2025. Para obtener una actualización sobre el estado actual de estas iniciativas legislativas, se recomienda consultar fuentes informativas recientes.

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