Este miércoles, la contienda legal entre la Liga de Expansión MX y la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) dio un giro significativo, aunque esta vez se centra en un grupo reducido de seis clubes. Desde el 19 de mayo de 2025, equipos como Atlético La Paz, Club Atlético Morelia, Cancún FC, Mineros de Zacatecas, Venados FC y Leones Negros de la UdeG han estado inmersos en un proceso de apelación ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) contra la FMF.
La disputa, que va más allá de los temas de ascenso y descenso, incluye demandas por cambios estructurales en su liga, tales como la abolición de la multipropiedad y el restablecimiento de un subsidio previamente detenido, el cual fue congelado después de que estos clubes alzaran la voz en busca de justicia.
En las últimas horas, se hizo pública la resolución del TAS, fallando a favor de la FMF. Sin embargo, este dictamen inicial no pone fin a las luchas legales de los clubes. Aunque las medidas cautelares solicitadas fueron desestimadas, se aclara que esto es solo un primer paso y que la batalla sigue en pie.
Entre las demandas planteadas se encuentra la exigencia de que la FMF restablezca el subsidio detenido y continúe el pago total de las cantidades acordadas en los convenios con los apelantes, abarcando las contribuciones atrasadas y las que están por vencerse en la temporada 2026-2027. También solicitan la prohibición de cualquier acción punitiva contra ellos en reacción a su apelación, así como la suspensión de cualquier avance en la separación de la Liga MX de la FMF.
Es evidente que la lucha de los clubes por sus derechos y por el futuro de la Liga de Expansión MX continua siendo un tema de gran relevancia en el ámbito del fútbol mexicano. Mientras la resolución final aún está pendiente, estos equipos se mantienen firmes en su determinación de buscar justicia y cambios estructurales que beneficien al crecimiento y sostenibilidad de la liga.
La narrativa en torno a la Liga de Expansión y su relación con la FMF es, sin lugar a dudas, una saga que seguirá capturando la atención de los aficionados un año y medio después de que comenzara este conflicto. El desenlace de este capítulo legal no solo impacta a los clubes involucrados, sino que también puede tener repercusiones en el ecosistema del fútbol en México en general.
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