Ticketmaster pertenece a una industria apasionante.

Los últimos tres años han marcado un hito en la historia de Ticketmaster México. Ana Arroyo, quien asumió la dirección de la conocida boletera en 2022, ha llevado a cabo una transformación digital sin precedentes. Con 20 millones de entradas vendidas anualmente en México, su principal objetivo ha sido modernizar el acceso a eventos masivos, pasando de los tradicionales boletos de papel a soluciones completamente electrónicas. Esta revolución busca mejorar la experiencia del usuario y aportar tecnologías de vanguardia al mercado.

En diciembre de 2022, la compañía enfrentó una crisis significativa durante el concierto de Bad Bunny en el Estadio Azteca. Alrededor de 1,600 boletos fueron vendidos por duplicado, lo que generó caos entre los asistentes. Este incidente se atribuyó a la piratería y la reventa, evidenciando una necesidad urgente de cambio. Hoy, Bad Bunny regresa a Ciudad de México con ocho fechas adicionales, y esta vez, el evento ha sido completamente digital, lo que ha permitido que no haya incidentes y que la experiencia del usuario sea fluida.

Una de las claves de este éxito ha sido la implementación de Safetix, un innovador sistema de boletos electrónicos que incorpora códigos dinámicos. Estos códigos cambian cada 15 segundos, dificultando la clonación y las capturas de pantalla, lo que significativamente ha minimizado el fraude. Arroyo recalca que, mientras empezaron a integrar estas tecnologías en 2023, se espera que su uso se expanda considerablemente en los próximos años, abarcando no solo la venta de boletos, sino también servicios adicionales como filas virtuales y curaduría de eventos personalizada.

En un solo día este año, Ticketmaster registró 3.5 millones de ingresos en su plataforma, aunque solo 500,000 usuarios lograron adquirir boletos, lo que subraya la alta demanda para ciertos eventos. Arroyo aclara que, aunque se comprende la frustración de aquellos que no consiguen entradas, la capacidad del estadio es limitada y no queda en manos de Ticketmaster ampliar las fechas o el aforo.

La inversión global de Ticketmaster en digitalización asciende a unos 900 millones de dólares en los últimos cinco años, destacando el papel de la inteligencia artificial y la gestión en la nube para mejorar la venta de boletos y el control de accesos. Esto ha permitido una reducción en los fraudes, aunque aún se sigue enfrentando a desafíos en un mercado donde el engaño sigue presente.

De cara a 2026, Arroyo tiene los ojos puestos en eventos deportivos cruciales, como el Gran Premio de México de Fórmula 1, y aunque no participarán en la venta de boletos para el Mundial, hay un optimismo evidente en el crecimiento del mercado deportivo mexicano.

Ana Arroyo, con una trayectoria consolidada en firmas tecnológicas como Uber y Amazon, señala que México es un país clave en la nueva era digital. Con una infraestructura robusta y una creciente demanda, el país se posiciona como un destino atractivo para eventos masivos que impulsan también el turismo. En resumen, Ticketmaster México, bajo el liderazgo de Arroyo, está en vías de redefinir la forma en que el público accede a la música y el entretenimiento en el futuro.

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