Tres bajas seguras y cinco posibles salidas del América.

Las Águilas del América están en un punto de inflexión tras un semestre lleno de tribulaciones, en el que no solo se quedaron fuera de toda competencia internacional, sino que tampoco alzaron ningún título en la Liga MX. El clima de desánimo ha invadido a un equipo que enfrenta críticas ferozmente compartidas entre sus seguidores. Ahora, la directiva busca reinventar su proyecto deportivo, con la clara intención de reposicionar al club entre los más competitivos y devolver la ilusión a su afición.

Para avanzar en esta revitalización, el primer paso será definir quiénes no continuarán en el club. Las bajas no solo permiten el ajuste en el vestuario, sino que también abren la puerta a posibles refuerzos, especialmente ante la sobrepoblación de jugadores extranjeros. La directiva está inmersa en este proceso, realizando reuniones entre el cuerpo técnico y directivos para establecer prioridades en el mercado.

¿Quiénes son los jugadores que se pueden ir del Club América?

Información proveniente de fuentes cercanas al club sugiere que los futbolistas que tienen más probabilidades de dejar la institución son Diego Valdés, Brian Rodríguez y Néstor Araujo, quienes no lograron convertirse en piezas clave en momentos trascendentales. Sin embargo, esta lista podría ampliarse, incluyendo a cinco futbolistas que están bajo evaluación: Javairo Dilrosun, que no ha terminado de convencer al nuevo entrenador André Jardine; Dagoberto Espinoza, potencial candidato a salir a préstamo; Cristian Calderón, cuya actuación ha sido inconsistente; Israel Reyes, que cuenta con ofertas desde Europa; y Jonathan dos Santos, quien evalúa la posibilidad de un retiro.

Ante este escenario, América se prepara para una reestructuración significativa, donde las decisiones drásticas no están descartadas. El objetivo primordial es construir un plantel más competitivo, con nuevas incorporaciones que devuelvan la intensidad y el compromiso que el equipo necesita. La afición, en su mayoría, espera que los próximos movimientos sean decisivos y que se trace una estrategia clara, que les ofrezca la esperanza de que el próximo torneo represente un verdadero cambio frente a las frustraciones del pasado.