Alojamiento y alquileres ante el Mundial 2026

El Mundial de Fútbol 2026 se perfila como el evento turístico más significativo en la historia reciente de México. Con sedes en Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, este prestigioso torneo ha suscitado un aumento considerable en la inversión relacionada con la construcción y modernización de activos inmobiliarios hoteleros.

Los expertos de la consultora GAYA enfatizan que no basta con sumar nuevas habitaciones; la celeridad en la ejecución y la adaptabilidad de los proyectos son esenciales. Según el Fondo Mixto de Promoción Turística de la Ciudad de México, la capital incorporará 3,300 nuevas habitaciones de hotel antes del Mundial, enfocándose en marcas de lujo que buscan capturar la relevancia del flujo turístico internacional.

En Guadalajara, la Secretaría de Turismo estatal prevé la apertura de 33 nuevos hoteles, con una inversión cercana a los 10,000 millones de pesos. Además, la Asociación de Hoteles de Jalisco anticipa que 12 de estos complejos abrirán antes de 2026, añadiendo aproximadamente 1,500 habitaciones. Mientras tanto, Monterrey también está en una fase de expansión, proyectando seis nuevos hoteles con una inversión de aproximadamente 1,500 millones de pesos, para fortalecer su capacidad de hospedaje.

A pesar del aumento significativo en la oferta hotelera, el verdadero reto radica en cumplir con los plazos establecidos y asegurar que todas las instalaciones operen con estándares modernos. La directora de Estrategia Comercial y Marketing de GAYA, Paola Govea, resalta la importancia de diseñar proyectos que sean flexibles y rentables post-evento. La presión en tarifas también se incrementará; en el caso de la Ciudad de México, se prevé que algunas noches alcancen hasta un 300% de aumento en precio.

Por su parte, la plataforma Airbnb estima que recibirá unos 44,000 huéspedes en la capital durante el torneo, lo que agudiza la necesidad de alojamiento alternativo, dado que la oferta hotelera tradicional no cubrirá la alta demanda.

La preparación para el Mundial no solo implica la construcción de nuevos hoteles, sino también la remodelación y modernización de propiedades existentes. Esto incluye adaptar lugares subutilizados y optimizar los espacios mediante sistemas modulares y prefabricados. Esta estrategia podría reducir los tiempos de ejecución entre un 20 y un 30%.

Es crucial que desarrolladores e inversionistas cumplan con normativas para evitar retrasos que puedan impedir la operación de los establecimientos durante el evento. Govea concluye que aquellos proyectos que logren equilibrar estrategia, rapidez y calidad estarán mejor posicionados para capitalizar la demanda del Mundial y, a su vez, fortalecer la oferta hotelera mexicana para los años venideros.

Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial. No olvides comentar sobre este articulo directamente en la parte inferior de esta página, tu comentario es muy importante para nuestra área de redacción y nuestros lectores.