Producida, escrita y dirigida por Mayra Hermosillo, Vainilla marca el notable debut de esta cineasta de 38 años, quien ha creado una obra que trasciende lo autobiográfico. La película se fundamenta en su infancia en Torreón, Coahuila, dentro de un matriarcado familiar, y se convierte en un exorcismo personal en el contexto de una industria cinematográfica donde se ha cuestionado su propio lugar. Las dudas iniciales han sido superadas con un rotundo éxito, ya que la película ha sido bien recibida en diversos festivales de renombre internacional.
En su última edición, el Festival de Venecia tomó nota de este trabajo, donde Guillermo del Toro, reconocido cineasta, se mostró profundamente conmovido por la historia. A su vez, en el Festival Internacional de Cine de Morelia, uno de los más importantes de México, Vainilla fue galardonada con el Premio del Público, lo que resalta su resonancia con el público.
El filme, que sitúa al espectador en México a finales de los años ochenta, narra la lucha de una familia compuesta por siete mujeres de distintas generaciones y visiones. Ellas se enfrentan a un desafío crítico: salvar la casa en la que viven, amenazada por una deuda. La perspectiva de la historia se narra a través de los ojos de Roberta, una niña de 8 años, quien embarca a la audiencia en un viaje de autodescubrimiento que impacta a su familia.
Desde una cafetería en la colonia Condesa de Ciudad de México, Hermosillo comparte que la película surge de recuerdos vividos con las mujeres que la rodearon en su infancia. Uno de sus mayores temores fue la posibilidad de perder a su familia y ser incapaz de ser parte activa de ese “clan de mujeres” que diplomáticamente se enfrentaba a la vida. La directora busca retratar no solo sus heridas y fortalezas, sino también su humanidad en toda su complejidad.
El reconocimiento internacional ha sido significativo para Hermosillo, quien ya había dirigido el cortometraje En la piel de Lucía en 2018 y ha tenido papeles en producciones como Narcos: México y Sierra Madre. Su switch del papel de actriz a directora no ha sido sencillo, especialmente a la hora de buscar financiamiento. Ella admite que es un reto convencer a los inversores de apostar por una cineasta sin un extenso currículum en largometrajes.
Durante su recorrido, Vainilla ha sido premiada en el Guadalajara Film Festival in L.A. y en el Festival de Huelva, donde recibió premios a Mejor Dirección y Mejor Reparto por las siete mujeres protagonistas. La conexión emocional de la película y su resonancia con el público han sido un impulso primordial en su trayectoria.
Hermosillo destaca que su filme se asemeja a una propuesta inclusiva y respetuosa del mundo emocional, un desafío que aún enfrenta en la industria, donde las mujeres luchan por obtener apoyo y reconocimiento. A pesar de los avances en la inclusión de directoras en el cine, la directora considera que se les sigue percibiendo como inestables en un entorno predominantemente pragmático.
La afirmación de del Toro sobre la emergente presencia femenina en la dirección cinematográfica es un buen augurio, pero el camino sigue siendo complicado. Hermosillo finaliza enfatizando que hacer una película es un proceso que invita a la creatividad colectiva, uno en el que su visión y experiencia personal se entrelazan para dar vida a Vainilla.
Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial. No olvides comentar sobre este articulo directamente en la parte inferior de esta página, tu comentario es muy importante para nuestra área de redacción y nuestros lectores.


