El FBI ha confirmado en la tarde de este jueves que los restos encontrados este miércoles en Florida pertenecen a Brian Laundrie, novio de Gabby Petito, la joven de 22 años cuya muerte ha atraído la atención mediática desde su desaparición a finales de agosto, mientras estaba embarcada en un viaje de pareja en furgoneta por Estados Unidos que ella retransmitió a sus cientos de miles de seguidores en las redes sociales. No ha trascendido la causa de la muerte de Laundrie, que estaba considerado “persona de interés” en la investigación.
El hallazgo pone fin a un mes de búsqueda del joven de 23 años, cuya desaparición fue denunciada por su familia el 17 de septiembre. En este tiempo se peinaron los alrededores de su casa familiar en el condado de Sarasota (Florida), concretamente en las algo más de 10.000 hectáreas de la Reserva Carlton, un humedal que es hogar de caimanes, coyotes, linces o serpientes. El examen de la dentadura del cadáver condujo a su identificación
Se dirigían hacia Yellowstone en un viaje de varios meses en furgoneta que combinaba dos pasiones compartidas por muchos jóvenes estadounidenses: la exploración de la naturaleza de los parques nacionales, y el disfrute de una temporada sabática en la que experimentar cierta libertad antes de hacer frente a las obligaciones de la vida adulta. Seis días antes de la última publicación de ella en sus redes sociales, la pareja protagonizó una bronca en Moab, en Utah, que fue grabada por la cámara corporal de un policía. Este acudió al lugar alertado por un posible incidente de violencia de género. Ese metraje encendió las sospechas de que bajo la apariencia de una vida perfecta retransmitida por Instagram subyacía una relación tóxica entre ambos que acabó en tragedia.
Información
El cadáver de Petito apareció el 19 de septiembre en ese parque de Wyoming. Murió, según la autopsia, por estrangulamiento. Su familia había denunciado la desaparición de Gabby una semana antes, después de que su pareja hubiera regresado solo el día 1 al domicilio paterno. Novios desde el instituto, vivían juntos desde 2019 en casa de los padres de él y estaban comprometidos desde julio de 2020.
El caso ha encendido un debate social en un país en el que desaparecen más de medio millón de personas al año, según cálculos de la web Statista. ¿Por qué una en concreto, la blanca, rubia y aparentemente perfecta Gabby, ha atraído todas miradas y ha desatado la compasión de los medios de comunicación, mientras miles de casos de personas de otras etnias y extracciones sociales pasan desapercibidos? La periodista negra Gwen Ifill habla del “síndrome de la mujer blanca desaparecida” para definir la desigual atención que reciben unos casos frente al resto.
El suceso también ha servido para poner en evidencia la disonancia que en las sociedades occidentales a menudo se da entre la vida virtual y la real. La existencia de Petito rozaba la perfección en sus redes sociales. Pero pese a que retransmitía su día a día en Instagram o YouTube, nada hizo presagiar el fatal desenlace.