CDMX aún debe aclarar el 60% de delitos

En el año 2023, la fiscalía de la Ciudad de México presentó un alarmante registro de 242,392 denuncias y querellas por diversos delitos. Más de la mitad de estos casos, específicamente 136,951 (56.5%), permanecían bajo investigación sin una resolución clara, de acuerdo con un informe elaborado por la organización civil México Evalúa.

El análisis, titulado “Hallazgos desde lo local 2023: Seguimiento y evaluación de la justicia penal en la Ciudad de México”, destaca que las denuncias dieron origen a 381,739 procedimientos, de los cuales únicamente un 39.11% (149,286) resultaron en resoluciones concretas. Un dato relevante es que la fiscalía capitalina utilizó con mayor frecuencia la figura del “archivo temporal” para 45,067 determinaciones, seguida de “incompetencia” en 45,067 casos. De acuerdo con jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el archivo temporal se aplica cuando no se encuentran evidencias suficientes para iniciar líneas de investigación, mientras que la incompetencia se refiere a la jurisdicción no competente para conocer del delito.

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Susana Camacho, coordinadora del Programa de Justicia de México Evalúa, advierte que “no podemos hablar de un sistema de justicia funcional si más del 60% de los casos se archivan”. Este hecho subraya la grave preocupación sobre la efectividad del sistema penal en la capital.

En cuanto a los tipos delictivos, el robo patrimonial lideró los reportes con un total de 74,958 casos, seguido de la violencia familiar con 35,578 incidencias y el fraude, que ocupó la tercera posición con 23,891. Los delitos contra la vida e integridad corporal también reflejan una preocupante cifra, siendo las lesiones el delito más reportado con 10,305 casos, seguidas del homicidio, que llegó a 1,467 incidentes.

La percepción ciudadana sobre la corrupción en las autoridades es igualmente alarmante. La policía de tránsito capitalina se ubicó como la más corrupta, con un 82.7% de desaprobación, superando el 73.9% a nivel nacional. El Ministerio Público no se quedó atrás, con un 81.7% de percepción negativa, un amplio margen respecto al promedio nacional del 62.8%. Las autoridades judiciales fueron vistas como corruptas por un 78.9% de los encuestados, notablemente por encima del 66.0% a nivel nacional.

A pesar de estos datos desalentadores, la Ciudad de México se posicionó en el noveno lugar a nivel nacional con un índice de capacidad estructural de 694 sobre 1000. Sin embargo, la incidencia delictiva en la capital fue significativa, ubicándose séptima entre 32 entidades con una tasa de 2,542.7 delitos por cada 100,000 habitantes, cifra que supera el promedio nacional de 1,657.4.

El informe también abordó la cifra negra de delitos no denunciados, revelando que un 92.6% de estos crímenes permanecieron sin reporte en la Ciudad de México, en comparación con el 92.4% a nivel nacional. En cuanto a la confianza en las instituciones judiciales, el Ministerio Público solo alcanzó un 38.6% de respaldo ciudadano, en contraposición al 58.1% a nivel nacional, reflejando un descontento generalizado.

Es evidente que la desconfianza en las instituciones judiciales y de seguridad en la Ciudad de México representa un desafío crucial, y las diferencias significativas en la percepción local frente a la nacional demandan acciones inmediatas y efectivas para restaurar la fe de la ciudadanía en un sistema de justicia que debe ser responsable y eficaz.

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