La Plástica de Santiago Robles: Un Viaje a Través del Tiempo y la Memoria
En medio de un entorno caracterizado por la marginación social y la violencia, el artista Santiago Robles utiliza su arte como vehículo para abordar temas de profunda relevancia, como los desplazamientos territoriales y la migración forzada. Su nueva exposición, que estará disponible hasta el 28 de noviembre, consta de 80 piezas bajo el título Amoxcalli: Cultivando memoria. Esta muestra no solo resalta la belleza artística, sino que también convoca a la reflexión sobre los paisajes heridos por el avance del progreso y los intimidades relaciones económicas con América del Norte.
Robles centra su obra en el maíz, considerado no solo un alimento esencial, sino también un símbolo de dignidad y herencia cultural. Cada grano, para él, es un cuerpo que mantiene viva la memoria de la tierra; un recordatorio de que ésta no se posee, sino que se hereda. En un contexto donde la economía convierte todo en mercancía, el maíz se transforma en un acto de reivindicación.
La diversidad de técnicas empleadas en sus creaciones es notable, utilizando desde litografía y grabado hasta pintura al óleo y materiales naturales como tintes de grana cochinilla, azul añil y papeles artesanales. Esto no solo enriquece la estética de las obras, sino que también subraya la conexión entre el arte y la naturaleza.
Cada composición de Robles presenta una rica convivencia de personajes históricos, flora y fauna mexicana, así como paisajes periféricos y símbolos de la contemporaneidad. La idea central de Amoxcalli (que significa “casa de libros” en náhuatl) es ser un espacio donde se preservan imágenes, relatos y memorias que interactúan entre sí. De esta manera, el espectador es invitado a acercarse a la exposición como si se tratara de un códice, explorando los símbolos que narran historias tanto del pasado como del presente.
Para profundizar en la experiencia, Robles acompaña cada pieza con un texto que incluye la cita bibliográfica utilizada para su creación. Esto no solo enriquece la narrativa visual, sino que también establece un diálogo entre el arte y las letras.
Ubicada en el Centro Cultural Universitario La Garza, en Pachuca de Soto, Hidalgo, la exposición Amoxcalli: Cultivando memoria ofrece una experiencia inmersiva que invita a la reflexión sobre la memoria, la tierra y la cultura, permaneciendo abierta hasta el 28 de noviembre. Con un enfoque en la interconexión de la memoria y la identidad, Robles brinda al espectador un espacio para contemplar las raíces que nos conectan con nuestro entorno y con nuestra historia.
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