A pesar de una temporada de titulares controversiales para Jerry Jones, algunos poco halagadores, el propietario de los Dallas Cowboys continúa dominando en el ámbito financiero.
Por duodécimo año consecutivo, Forbes calculó a los Cowboys como la franquicia más valiosa de la NFL, fijando el valor del equipo en $ 8 mil millones de dólares. Eso es un asombroso aumento del 23 por ciento con respecto al año pasado, gracias en parte al repunte de los ingresos de la liga desde la temporada pandémica de 2020 y la reciente venta de los Denver Broncos por $4,650 millones de dólares. También se espera que esa cuenta mantenga a Dallas como el equipo deportivo más valioso del planeta, un honor que los Cowboys han tenido desde 2016, cuando la franquicia superó al titán del fútbol español Real Madrid.
Curiosamente, el honor de Forbes y el aumento de valor de los Cowboys no se acercan a la explosión de inversión que Jones experimentó este año con Comstock Resources, la compañía de energía de Texas que Jones compró y comenzó a optimizar en 2018. CNBC informó el 1 de julio que Jones La participación inicial de $ 1.1 mil millones de dólares se había disparado a $ 2.6 mil millones de dólares. El precio de las acciones de Comstock rondaba los $ 12 el día de ese informe. Menos de dos meses después, el valor de Comstock se disparó junto con el precio del gas natural, llegando a casi $20 por acción esta semana. Eso representa un aumento de casi el 66 por ciento en el valor de los $ 2.6 mil millones de dólares en acciones que Jones tenía en julio. Lo que significa que si el informe inicial de la CNBC fuera correcto, la inversión inicial de $1,100 millones de dólares de Jones en Comstock Resources podría valer hasta $4,300 millones de dólares.
El aumento en el valor de los Cowboys ha sido mucho más orgánico y de largo plazo, presentando un aumento del valor del 3,900 por ciento desde que Jones compró la franquicia en apuros en 1989 por $150 millones de dólares. En los 34 años transcurridos desde esa compra, la NFL se ha convertido en la corporación deportiva más rentable de Estados Unidos a pasos agigantados. Parte de eso se debe a que la liga se convirtió en un gigante de los ingresos, lo que ha aumentado los valores de la franquicia en todos los ámbitos. Otra parte específica de la historia financiera de los Cowboys fue que Jones intimidó a la NFL con litigios en la década de 1990, lo que resultó en que Dallas pudiera cerrar acuerdos de patrocinio extremadamente lucrativos fuera del modelo de reparto de ingresos de la liga. Desde esa ganancia de ingresos, Jones y Dallas nunca han mirado hacia atrás, convirtiéndose en un líder anual de la liga en ganancias.
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