La UNESCO declara como Patrimonio Mundial al edificio de la ESMA, el mayor centro de torturas de la dictadura argentina.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha anunciado recientemente la declaración del edificio de la ESMA (Escuela de Mecánica de la Armada) como Patrimonio Mundial. Esta distinción se otorga en reconocimiento a la importancia histórica y cultural que este lugar tiene debido a su papel como el mayor centro de torturas durante la dictadura argentina.
La ESMA, ubicada en Buenos Aires, fue utilizada como un centro clandestino de detención y tortura durante el período entre 1976 y 1983, cuando el país estaba gobernado por una dictadura militar. Durante esos años oscuros, miles de personas fueron secuestradas, torturadas y desaparecidas por el régimen, y la ESMA fue uno de los lugares emblemáticos donde se llevaron a cabo estas atrocidades.
La declaración de la UNESCO reconoce la necesidad de preservar la memoria de estos eventos traumáticos y la importancia de mantener este edificio como un testimonio de los abusos cometidos durante ese período oscuro de la historia argentina. Esta designación busca honrar a las víctimas y sus familias, así como educar a las generaciones futuras sobre los horrores del pasado y promover la importancia de los derechos humanos.
El edificio de la ESMA ha sido objeto de una serie de proyectos de memoria y preservación en los últimos años. Se ha convertido en un espacio de encuentro y reflexión, albergando ahora un sitio de memoria, un museo y un centro cultural. Estas iniciativas buscan no solo preservar el legado histórico de la dictadura argentina, sino también promover la justicia, la verdad y la reconciliación.
La declaración de la UNESCO ha sido recibida con gran satisfacción por parte de varias organizaciones de derechos humanos y sobrevivientes de la dictadura. Consideran que esta distinción es un reconocimiento al sufrimiento y la lucha de quienes fueron víctimas de tortura y desaparición forzada, y un paso importante hacia la construcción de una sociedad basada en la justicia y el respeto a los derechos humanos.
La designación del edificio de la ESMA como Patrimonio Mundial también plantea desafíos y preguntas sobre cómo preservar y difundir la memoria de estos crímenes de lesa humanidad. A medida que avanza hacia el futuro, Argentina se enfrenta al desafío de garantizar que estas atrocidades nunca se repitan y que las generaciones futuras sean conscientes de las consecuencias devastadoras de la violencia y la violación de los derechos humanos.
En resumen, la declaración de la UNESCO del edificio de la ESMA como Patrimonio Mundial es un reconocimiento a la importancia histórica y cultural de este lugar como el mayor centro de torturas de la dictadura argentina. Esta designación busca preservar la memoria de las víctimas y promover la educación sobre los derechos humanos. A través de proyectos de memoria y preservación, Argentina busca construir una sociedad basada en la justicia y el respeto. La declaración plantea desafíos para garantizar que estas atrocidades nunca se repitan y que las generaciones futuras sean conscientes de las consecuencias devastadoras de la violencia.
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