En la era moderna, donde la tecnología nos proporciona herramientas que antiguamente eran consideradas imposibles, muchos piensan que es posible grabar y recordar absolutamente todo. Pero, ¿sería esto una bendición o una maldición? Definitivamente el autor del artículo en cuestión parece tener una opinión clara sobre el tema. En su visión, si recordáramos todo, nos iría mal. Vivir es olvidar, y es gracias a ese olvido que podemos seguir adelante.
El olvido es un fenómeno interesante, porque aunque pueda parecer un defecto en el sistema, es extremadamente necesario. Si no olvidáramos nunca nada, estaríamos condenados a vivir sólo en el pasado, no tendríamos la capacidad de superar situaciones traumáticas o inquietantes. Entonces, el olvido se convierte en una herramienta vital para nuestro crecimiento como seres humanos.
En la actualidad, con la cantidad astronómica de información que recibimos diariamente, es cada vez más importante saber seleccionar qué es lo que queremos dejar en nuestra memoria y qué es lo que preferimos olvidar. En este sentido, el autor señala distintos momentos donde recordar todo sería poco práctico e incluso peligroso.
Finalmente, cabe mencionar que el autor del artículo no está en contra del recuerdo, sino de la idea de que sea una especie de memoria infalible. Nuestra memoria es falible, y eso no es necesariamente algo malo. Pero si quisieramos recordar cada momento de cada día, sin duda eso tendría un costo demasiado alto. En conclusión, la enseñanza que nos queda es que el olvido es parte de nuestra vida, y aunque pueda ser doloroso a veces, es eso lo que nos permite seguir adelante hacia un futuro mejor.
En resumen, el autor nos presenta una idea que a simple vista podría parecer descabellada, pero que al profundizar vemos que tiene mucho sentido. Recordar todo no sería necesariamente positivo para nosotros, y es en el olvido que encontramos la forma de avanzar hacia adelante. Este artículo nos permite reflexionar sobre nuestra propia relación con el olvido, y tal vez reconsiderar que quizás no sea tan malo olvidar algunos detalles.
Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial.