El reciente cambio en el Reglamento Interior de la Secretaría de Cultura (SC) federal marca un importante avance en la gestión cultural del país, destacando la relevancia de los pueblos indígenas y afromexicanos. Claudia Curiel de Icaza, actual secretaria de Cultura, conversó sobre los objetivos y la estructura de este nuevo reglamento, el cual fue publicado el 22 de julio de 2025, firmando así un nuevo rumbo que dista del de la administración anterior de Enrique Peña Nieto.
Curiel de Icaza enfatiza que el reglamento no solo pretende optimizar recursos al reducir de 16 a 12 unidades administrativas, sino que también busca evitar duplicidades y, en consecuencia, mejorar la eficiencia operativa de la Secretaría. Esto responde a un compromiso de trabajar en función de los derechos culturales de todas las comunidades, priorizando una política cultural inclusiva que trascienda las altas manifestaciones artísticas y abarque lo cotidiano y lo tradicional.
La perspectiva de la nueva administración es clara: priorizar el fortalecimiento del patrimonio vivo y la creación cultural a través de la Unidad Estratégica de Culturas Vivas, un enfoque que tiene como objetivo salvaguardar la diversidad cultural y fomentar la colaboración con diferentes territorios y comunidades. No se trata solo de una retórica vacía, sino de un compromiso palpable que está respaldado por un marco constitucional y una ambiciosa política pública.
Curiel de Icaza señala que el nuevo reglamento es el resultado de un esfuerzo significativo, con “horas y horas de trabajo de reflexión” y una revisión crítica del reglamento anterior. Este trabajo profundo no solo ha llevado a una reestructuración administrativa, sino que también se prevé una inminente publicación de un Plan Sectorial que definirá los cuatro ejes fundamentales para el desarrollo cultural en los próximos años.
El enfoque en los Circuitos y Festivales también resalta la intención de equilibrar el ecosistema cultural del país, promoviendo un flujo coherente de programación y exhibición de obras. Con una estructura presupuestaria que se mantiene equilibrada, se busca optimizar recursos y promover una cultura inclusiva que, según Curiel de Icaza, debe ser parte integral de la vida diaria de los ciudadanos.
A menos de un año desde su nombramiento, se evidencia un esfuerzo por transformar la gestión cultural, fundamentada en la escucha activa a las necesidades de las comunidades y en una política de justicia hacia los pueblos originarios y afromexicanos. Este nuevo capítulo abre una puerta prometedora hacia un futuro cultural más equitativo y accesible para todos.
Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial. No olvides comentar sobre este articulo directamente en la parte inferior de esta página, tu comentario es muy importante para nuestra área de redacción y nuestros lectores.