Este miércoles cinco reporteros afganos fueron detenidos y recluidos por los talibanes durante unas protestas en Kabul contra el nuevo gobierno interino. Tras varias horas bajo custodia policial en una comisaría de la capital, dos de ellos fueron sometidos a palizas con porras, cables eléctricos y látigos. “Levantaban palos y nos golpeaban con todas sus fuerzas“, relata uno de los periodistas en el vídeo que acompaña a esta noticia. Las imágenes de sus heridas dieron la vuelta al mundo tras ser compartidas en redes sociales por el director de su periódico, Etilaat Roz (“Día de la información”), uno de los principales diarios afganos.
Taqi Daryabi, de tan solo 22 años, es uno de los periodistas apaleados. Reconoce en una entrevista que teme que “al tratar así a los periodistas, [los talibanes] terminen con el periodismo en Afganistán dentro de unos meses”. Su compañero, Neamat Naqdi, hace un llamamiento a la comunidad internacional: “que presionen sobre el Emirato Islámico para que ningún periodista sea golpeado como nosotros“.
