En Chiapas la jornada electoral se vio empañada por la violencia, donde durante las tres elecciones que se llevaron a cabo se registraron varios tiroteos en distintas zonas del estado, y el proceso de votación se vio retrasado en algunas partes debido a los disturbios.
A pesar de que había una fuerte presencia militar en la zona, los enfrentamientos entre grupos políticos y delincuentes no se pudieron evitar. Según la Fiscalía de Chiapas, hubo un total de 14 heridos y tres muertos.
Las elecciones más afectadas fueron las de gobernador, donde el candidato de la oposición denunció varios casos de intimidación y amenazas a sus simpatizantes por parte del partido en el poder. Además, se registraron varios incidentes en donde los votantes fueron obligados a votar por un partido en específico.
Los candidatos presidenciales también se vieron involucrados en los conflictos en Chiapas. Uno de los candidatos sufrió un intento de asesinato por parte de un grupo armado y otros políticos denunciaron amenazas y ataques en contra de sus simpatizantes durante la campaña electoral.
La violencia política en Chiapas es una muestra de la tensión que se vive en México durante los procesos electorales, donde los grupos delincuenciales y los partidos políticos corrompen el proceso democrático en aras de conseguir el poder. Es fundamental que las autoridades tomen medidas para garantizar la seguridad de los votantes y la transparencia en el proceso electoral.
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