El comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño, se presentó en una audiencia pública en Ciudad Juárez, Chihuahua para discutir sobre el incendio que tuvo lugar en la estación migratoria en aquella ciudad. Un total de 24 personas resultaron heridas debido a dicho siniestro y dos murieron en el lugar. El incidente ha causado preocupación y consternación en la comunidad local e internacional debido a las condiciones en que los migrantes son recibidos en las estaciones migratorias en México.
Este tipo de incidentes son consecuencia de la falta de atención adecuada a la problemática migratoria en México, donde cientos de miles de personas cruzan la frontera en busca de asilo y una mejor vida. Las estaciones migratorias en México han sido criticadas por su falta de infraestructura adecuada y por el trato inhumano que reciben los migrantes. La falta de liderazgo y la interminable corrupción en las autoridades migratorias sólo empeoran la situación.
Este incidente demuestra la necesidad urgente de reforma migratoria en México y en el mundo en general. Los migrantes merecen un trato digno y humano, independientemente de su estatus migratorio o su origen. México, como país receptor de migrantes, debe esforzarse por crear un sistema migratorio justo, seguro y humano. Los líderes globales también deben unirse para abordar esta problemática de manera coordinada y efectiva.
En general, el incendio en Ciudad Juárez es una llamada de atención para las autoridades responsables de la regulación migratoria en México y en todo el mundo. Es hora de que se tomen medidas concretas para garantizar la seguridad y el bienestar de los migrantes, en lugar de criminalizar su movilidad.
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