En el mundo frenético y caótico de hoy en día, cada vez son más las personas que buscan la felicidad. Algunos la encuentran en relaciones, otros en el trabajo o en el éxito financiero. En cualquier caso, la felicidad sigue siendo un misterio. ¿Qué es exactamente la felicidad? ¿Cómo se alcanza?
Frank Bascombe, el personaje central de la novela “Se mía” de Richard Ford, parece haber encontrado la respuesta. A lo largo de la novela, Bascombe reflexiona sobre los altibajos de la vida y su búsqueda de la felicidad. Al final, llega a la conclusión de que la felicidad se encuentra en las pequeñas cosas de la vida, en los momentos cotidianos que se acumulan a lo largo del tiempo.
Bascombe llega a esta conclusión después de enfrentar numerosas dificultades en su vida. En una época, era un agente de bienes raíces, pero renunció a su trabajo después de que su hijo murió en un accidente automovilístico. Luego, se somete a una operación de cadera que le deja cojeando.
A pesar de todas estas dificultades, Bascombe sigue buscando la felicidad. Al final, la encuentra en intrigante, inesperado y sorprendente lugar. Bascombe es capaz de encontrar la felicidad en los momentos más mundanos de la vida, como leer un libro o hacer una caminata.
En resumen, la felicidad es un concepto complejo que se elude a la mayoría de las personas. Sin embargo, “Se mía” de Richard Ford, muestra que la felicidad no es algo que se pueda perseguir activamente. En cambio, se encuentra en los momentos cotidianos y mundanos. Al buscar la felicidad con calma y paciencia, Bascombe finalmente llega a su destino.
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