Las autoridades de Ciudad de México han anunciado este viernes que la capital pasará a partir del lunes a color amarillo dentro del semáforo epidemiológico, tras varias semanas de caída en los registros de contagios y hospitalizaciones por covid-19. Es la primera vez durante toda la pandemia y desde la vigencia del sistema de monitoreo creado por la Secretaría de Salud, que la capital de México llega al semáforo amarillo, lo que permite la reapertura de más actividades sociales y económicas. El anuncio lo ha hecho Eduardo Clark, director de Gobierno Digital de la Agencia Digital de Innovación Pública, quien ha asegurado que “por primera vez desde el inicio de la pandemia” la capital ha registrado “mejoras continuas”. “Ya cumplimos las condiciones por la tendencia a la baja”, ha dicho el funcionario.
Clark ha informado de que el nivel de hospitalización en la capital es del 16,5%, el más bajo registrado en toda la pandemia. Además, ha dicho que se han reducido en un 50% los ingresos hospitalarios por covid-19. La tendencia a la baja es clara. Según la información hecha pública esta mañana, las hospitalizaciones pasaron de 1.681 personas el 30 de abril a 1.404 hoy, con una disminución de 277 personas. El funcionario ha agregado que 1.308 camas están ocupadas en los hospitales públicos y hay más de 6.000 disponibles.
La zona metropolitana de Ciudad de México, que incluye al Estado de México, pasó a semáforo naranja a mediados de febrero tras dos meses de máximas restricciones. Eso permitió que se reabrieran las funciones de teatro al aire libre, clases individuales en gimnasios y albercas y la apertura de los templos.
Con el semáforo en amarillo, a partir del lunes se mantiene el programa Ciudad al aire libre, que ahora permitirá a los restaurantes ampliar el mobiliario en banquetas de la capital. También se otorga a los bancos las posibilidad de operar sin restricción de horario. Además, se amplía a un 40% la capacidad de acceso en los comercios, así como en salas de cine. Los hoteles podrán organizar convenciones con un aforo del 50%. A partir del 12 de mayo se podrán celebrar encuentros deportivos al aire libre y desde el 17 se da el visto bueno a citas de entretenimiento y teatros en espacios cerrados. Fiestas infantiles y exposiciones pueden realizarse desde el día 27, con un máximo de aforo del 30%.
Tras largos meses de registrar cifras alarmantes de contagios, muertes y hospitalizaciones, la pandemia comienza a dar un respiro a una ciudad que intenta recuperarse del golpe. La capital registró el 21 de mayo de 2020 el pico más alto de contagios y todavía en diciembre los hospitales del valle de México, que incluyen la ciudad, sus al rededores y parte del Estado de México, donde viven unos 23 millones de personas, estaban al 75% de ocupación. Zonas como Iztapalapa están entre las más golpeadas. Con unos dos millones de habitantes, tenía una de las tasas de contagios por covid más altas de la ciudad, con 39.000 casos registrados en diciembre. En ese mes las autoridades decidieron mantener el semáforo rojo, suspendiendo las actividades no esenciales hasta el 10 de enero. El respiro comenzó con la llega de la primavera y un clima más cálido, aunque el Gobierno capitalino no baja la guardia y mantiene el monitoreo constante de casos. Si hay un aumento en estos, la ciudad puede cambiar de semáforo nuevamente.
En cuanto al programa de vacunación, la jefa de Gobierno de la ciudad, Claudia Sheinbaum ha dicho que se han aplicado más de un millón de vacunas en la capital y que hoy termina el programa nacional de vacunación en las alcaldías de Iztapalapa y Tlalpan, con la aplicación de la segunda dosis para los adultos mayores de 60 años.
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