Las mascarillas ocultaron 20.000 sonrisas. Aunque no podían verse, uno sabía que estaban ahí. Era imposible que no fuera así. 90 minutos fueron suficientes para descongelar los viejos recuerdos de los tiempos prepandémicos. Los conciertos masivos han vuelto a Estados Unidos, un país que ha vacunado al menos con una dosis al 45 % de su población. Las vacunas han sido cabeza de cartel en Vax Live, un acontecimiento transmitido vía YouTube a 100 países que mezcló el activismo de las celebridades con los líderes políticos y con el que se ha pretendido mostrar al mundo que el retorno a lo mejor de nuestro pasado está a nuestro alcance.
Vax Live fue una experiencia extraña, acorde con los tiempos vividos. Un concierto organizado en un gigantesco estadio para 70.000, donde casi la totalidad de los espectadores eran sanitarios y trabajadores esenciales ya vacunados y a los que les fueron exigidas pruebas negativas de coronavirus. En los palcos había empresarios que no encajaban en el perfil, pero que estaban presentes en la que fue la inauguración extraoficial de un palacio del fútbol americano que costó más de 5.000 millones de dólares. Todos corearon y bailaron canciones en un evento cuidadosamente diseñado para la televisión, que nunca alcanzó un clímax por las repetidas pausas de cambios de los escenarios y las continuas lecturas del teleprompter de Selena Gomez, una de las conductoras de la noche. Era una noche para promover la mayor petición humanitaria del momento, la equitativa distribución de la vacuna contra el coronavirus en todo el mundo.
“Había estado esperando algo así desde hace meses. Y volver a estar junto a tanta gente da un poco de miedo ahora por la falta de costumbre pero esta noche es simplemente genial”, dijo Lina Martínez, enfermera de 34 años en un hospital al sur de Los Ángeles. Acudió el domingo 2 de mayo, el día de la grabación del evento, con su pareja y algunos compañeros de la clínica. Los conciertos eran uno de los entretenimientos favoritos de Martínez antes de la pandemia. El Vax Live ha acabado con la sequía iniciada en marzo de 2020.
Eddie Vedder, vocalista de Pearl Jam, se encargó del primer número musical después de haber sido presentado por su amigo Sean Penn. “Maldita sea, este es un sentimiento que no habíamos tenido en mucho tiempo”, dijo sorprendido, después de interpretar Corduroy, por estar nuevamente parado frente a un micrófono y una audiencia. “Si tienen vacunas no la acumulen, ¡distribúyanlas ya!”, fue el mensaje a los líderes políticos del rostro más reconocible de la banda de Seattle.
El papa Francisco, a través de un mensaje grabado, recordó que el mal no es invencible y pidió no olvidar a los más vulnerables en un momento donde parte de la población desarrollada mira con reticencia la vacuna mientras países como India rebasan los 4.000 muertos diarios. El pontífice pidió la suspensión temporal de la propiedad intelectual de los medicamentos como muestra de un “espíritu de comunión que permita generar un modelo económico diferente, más inclusivo, justo y sustentable”. La petición de Bergoglio parece ser también acompañada por Estados Unidos.
La nota precedente contiene información del siguiente origen y de nuestra área de redacción.