Nuestro sistema olfativo puede ser tan poderoso que, al percibir ciertos olores, puede remitirnos a recuerdos de nuestra infancia. Sin embargo, algunos olores pueden resultar un misterio, como el olor del espacio exterior, en particular de la Luna. ¿A qué huele la Luna? En 1969, el astronauta Buzz Aldrin, quien fue el piloto del módulo de la misión Apolo 11 junto al comandante Neil Armstrong, se convirtió en uno de los dos primeros seres humanos en pisar la Luna y descubrió el olor de la Luna al quitarse el casco en el módulo lunar.
A su regreso a la Tierra, Buzz Aldrin reveló que la Luna olía a pólvora gastada. Después de 54 años desde su declaración, un especialista recreará el peculiar olor para exhibirlo en una muestra del espacio exterior y así sea conocido por los visitantes.
El descubrimiento del olor de la Luna por parte de Aldrin fue una de las muchas emocionantes hazañas de la misión Apolo 11, que permitió a los seres humanos pisar la Luna por primera vez. Desde entonces, la Luna ha sido objeto de fascinación y estudio, y su olor sigue siendo un enigma para la mayoría de las personas. La recreación del olor permitirá a los visitantes experimentar una parte del espacio exterior y aprender más sobre la Luna y el universo en general.
En entrevista para “Nature”, el francés platicó que ahora ha está trabajando en la creación del olor de la Luna para una exposición en Space City, un museo en Toulouse.
Gracias a la descripción del astronauta Aldrin, el especialista ha podido recrear ese curioso aroma gracias a los productos químicos, que conserva en forma líquida dentro de una habitación a 14 ºC.
Y es que Moisseeff cuenta con un laboratorio totalmente equipado con aceites esenciales y extractos naturales, que le han permitido crear algunos olores desde cero.
“Recreo olores usando un aparato de destilación para extraer sustancias, un evaporador rotatorio para eliminar solventes, escalas de medición muy precisas para los productos químicos y un archivo de 3 mil a 4 mil olores de referencia”, dijo el especialista.
Asimismo, reveló que desde hace años ha desarrollado olores que le piden para ciertas exposiciones y que terminan siendo todo un arte durante su proceso de creación.
“He creado muchos olores para exposiciones, como los de las selvas tropicales de las Islas Andaman en el Océano Índico. He trabajado en aromas utilizados para capacitar a expertos en la industria del vino, incluso de variedades de uva, suelos, minerales y notas vegetales y florales”, señaló Moisseeff
El químico también dio a conocer que tiene su propio museo denominado “Explorarôme”, el cual se encuentra en su casa y puede ser visitado por el público en general.
“Los visitantes pueden oler especies de plantas aromáticas en el jardín de fragancias y plantas exóticas en el invernadero, aprender cómo se capturan los aromas en el laboratorio e intentar adivinar qué están oliendo en nuestra exposición interactiva.
Gracias por leer Columna Digital, puedes seguirnos en Facebook, Twitter, Instagram o visitar nuestra página oficial.