La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una declaración este lunes en la que señaló que el COVID-19 sigue siendo una emergencia sanitaria global. Esta enfermedad, que ha afectado a millones de personas en todo el mundo, sigue siendo una amenaza para la salud pública y se requiere una respuesta coordinada y global para controlar su propagación.
La OMS ha trabajado de manera constante para proporcionar información actualizada y recomendaciones a los países y a la población sobre cómo prevenir y controlar la enfermedad. Además, ha coordinado con los gobiernos y otras agencias internacionales para apoyar el acceso a pruebas, tratamientos y vacunas contra el COVID-19.
La OMS argumentó que levantar el estado de emergencia requeriría una “acción de salud pública a largo plazo” y dijo que es poco probable que elimine el virus de los “reservorios” humanos y animales de la OMS. Esta posición es clara.
Los pensamientos de los expertos del Comité de Emergencia sugieren ‘mecanismos alternativos’ para mantener la atención sobre el Covid-19, tanto a nivel nacional como mundial, frente a una emergencia internacional.
El Director General de la OMS reiteró recientemente que la respuesta global a la pandemia no puede considerarse exitosa. Muchos países aún carecen de vacunas y tratamientos para atender a sus pacientes, y las economías de la red de salud de muchos países de bajos ingresos continúan sufriendo.
Es crucial que todos sigamos las medidas de prevención recomendadas por la OMS, como el uso de mascarillas, el lavado frecuente de manos y la distancia física, para ayudar a controlar la propagación del virus. La OMS continuará monitoreando la situación de cerca y trabajando para proteger la salud y la vida de las personas en todo el mundo.
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