La idea de este postre no es precisamente que sea “light” sino que utilizamos ingredientes deliciosos y nutritivos que potencian sus sabores al ser horneados.
Un bizcocho con un poco de fibra de la zanahoria y los frutos secos que le harán muy bien a tu cuerpo.
En la cocina entendemos que no todos pueden comer lo mismo por eso adaptamos los postres de momentos especiales y celebraciones a las necesidades de los comensales.
Ingredientes:
240gr Zanahoria rallada finamente
2 claras de huevo
2 huevos
El jugo de ½ Limón
80gr de Avellana molida
70gr de Almendra molida
5ml de Esencia de vainilla
5 gr de Canela molida
5 gr de Jengibre molido
3 gr de Bicarbonato de sodio
Una pizca de sal
Elaboración
1.-Precalentar el horno a 180ºC y preparar un molde rectangular de unos 20 cm.
2.- Lavar y secar bien las zanahorias, pelarlas y rallarlas hasta obtener 240 gr y mezclar con el zumo de la mitad del limón. Reservar.
3.-Romper los huevos enteros en un recipiente con la esencia de vainilla y batir con unas varillas.
4.-Incoporar la avellana, la almendra, las especias, el bicarbonato y la sal.
5.-Revolver la mezcla anterior y añadir la zanahoria, mezclar nuevamente.
6.-Batir aparte las otras dos claras de huevo hasta que estén esponjosas y añadirlas a la masa posteriormente, con movimientos envolventes ayudándonos de una miserable.
7.- Llevar al molde, igualar la parte superior con ayuda de una espátula y añadir un poco de canela, si se desea.
8.-Hornear durante unos 40 minutos, hasta que al pinchar el centro con un palillo salga prácticamente limpio.
9.-Esperar un poco antes de desmoldar y dejar enfriar por completo sobre una rejilla.